Tres pensamientos positivos para el día a día

El pensamiento positivo es uno de los ingredientes de la felicidad. Pensar en positivo no significa caer en el idealismo y dejar de tener los pies en el suelo. El optimismo realista es posible. Pero por supuesto, es muy importante cultivar la mente con ideas bonitas y bellas con las que aprender a caminar de verdad con ilusión.

La vuelta al trabajo viene acompañada en muchos casos de dificultades para adaptarte a la rutina, cansancio y estrés. Por ello, en Centro de Salud, te guiamos a modo de coaching en el optimismo de disfrutar de la vida.

Tres pensamientos positivos para el día a día
1. En primer lugar, aprende a dar las gracias porque este gesto tan simple es uno de los mayores ejemplos de optimismo humano. Tienes un montón de razones para dar gracias a la vida. Puedes elaborar una lista con todos esos detalles que hacen de tu existencia un gran regalo.

2. En segundo lugar, ríe más a nivel interno. Para ello, recréate en el recuerdo de esos momentos de diversión que has compartido con amigos y familiares. Un momento feliz no se agota nunca porque puedes recordarlo siempre que quieras. Puedes practicar la risoterapia a nivel mental.

3. El pensamiento positivo surge de la motivación de tener razones por las que vivir. En ese caso, busca cada día un propósito que dé sentido a tu jornada.

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