Celebran la Semana Mundial de la Lactancia Materna

La Organización Mundial de la Salud (OMS) conmemora en todo el planeta entre el 1 y el 7 de agosto del corriente año la «Semana mundial de la Lactancia Materna» como un intento de fomentar activamente esta práctica como la mejor y más barata fuente de nutrientes naturales para el crecimiento y desarrollo saludable de los lactantes y niños pequeños.

Durante las últimas décadas las investigaciones que resaltaron sus efectos beneficiosos proliferaron y numerosas recomendaciones fueron elaboradas por expertos. La OMS afirmó con total seguridad que la lactancia materna en forma exclusiva y a demanda, es decir cuando el niño lo requiera, durante los primeros seis meses de vida y luego asociada a otros alimentos complementarios hasta los dos años de edad reduce la mortalidad infantil y tiene beneficios importantes que son visibles incluso al llegar a la edad adulta.

Un niño alimentado con leche materna tiene un mejor desarrollo sensorial y cognitivo y se encuentra más protegido frente a varias enfermedades infecciosas y crónicas. Los adultos que de pequeños recibieron lactancia materna suelen registrar una tensión arterial más baja, menores niveles de colesterol, sobrepeso, obesidad y diabetes que aquellos individuos que fueron alimentados sólo con leche artificial.

La alimentación artificial administrada durante los seis primeros meses de vida según calculan en la OMS puede contribuir a más de un millón de muertes infantiles por año en todo el mundo. No contiene el valioso calostro, que consiste en una leche amarillenta y espesa que se produce al final del embarazo y que está constituido por ingredientes tales como proteínas y anticuerpos que son vitales para el recién nacido. Por otra parte a veces no esta exenta de complicaciones asociadas a su mala preparación o reconstitución en lugares en donde por ejemplo no hay agua potable.

Pero por si esto fuera poco, la lactancia materna brinda también un efecto protector para las propias madres. Les permite recuperar rápidamente el peso anterior al embarazo y reduce sus chances de padecer enfermedades tales como cáncer de mama u ovario en el futuro.

Son pocas las situaciones particulares que contraindican la lactancia materna como por ejemplo la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) o la ingesta crónica de algunos medicamentos entre algunas otras. Deberán ser discutidas con los médicos tratantes quienes  de así considerarlo brindarán otras opciones.

En la actualidad sólo un cuarenta por ciento de todos los niños del mundo son alimentados con lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses. Los esfuerzos de la OMS apuntan a que un número mayor de ellos lo hagan ya desde la primera hora de vida.