El estrés es una emoción más del diccionario emocional, sin embargo, muchas personas la vinculan con el mundo laboral porque es en la oficina donde se puede sentir más la presión del rendimiento. Muchas personas piensan que el estrés es negativo, sin embargo, nada más lejos de la realidad. También puede ser efectivo cuando se produce en un grado leve porque ello, implica responsabilidad y motivación hacia una meta. Un estudiante que no sienta un mínimo de nerviosismo ante un examen no se esforzará al cien por cien.
Pero el estrés también puede ser de gravedad cuando se sufre en un alto nivel y durante un tiempo prolongado. Por ello, se puede reducir a través de estos pasos:
1) Es importante tener unos hábitos de vida regulares, no dejar que los problemas del trabajo afecten a la vida privada y disfrutar del tiempo de ocio. Descansar para volver a la oficina con más fuerza.
2) Alimentar la autoestima. El estrés suele surgir porque la persona se manda a sí misma mensajes negativos ante un fracaso, por ejemplo. Todas las personas cometen errores, por tanto, es bueno evitar la culpa y tomar un conflicto como una ocasión para el aprendizaje.
3) Es bueno estar en contacto con la naturaleza, dar un paseo al aire libre y disfrutar de una buena alimentación.
4) Existen cursos de yoga y de taichí que son excelentes para combatir los efectos negativos del estrés que puede provocar cansancio y mal humor.
5) Ante una sensación de angustia profunda es importante visualizar una imagen agradable de paz y de calma. Un recuerdo que esté vinculado con la felicidad.
Imagen: Flickr-Cassey Muir-Taylor